Junto al verbo ha estado la vida, esa que nos enseña todos los argumentos. Pista, huella, cicatriz... es la entrega de un equilibrio elocuente que aborda los indicios de la poesía. En esta antología, los poetas se expresan y avanzan con su propia voz, en una diversidad de tonos y circunstancias que iluminan sus paisajes interiores. La intimidad y la mesura les nace de su aptitud para referir de un modo perdurable una historia interna, una imagen del mundo, dándo sabor y resonancia a sus visiones. Es mi deseo que la palabra siga creciendo y se convierta en renovada creatividad.