“Soportar el misterio nos pide la poesía, cita a ciegas adonde asisten la intemperie y la fe. Fe en el otro, sin el cual no soy, pero con el que tampoco soy en permanencia. Allí media el poema. El lenguaje es cincelado como se cincela la piedra, en un proceso de renuncias y de accidentes que develan descubrimientos, no es materia inerte sino abierta y viva que nos produce todo tipo de emociones, nos habla y le respondemos desde el seno de nuestra subjetividad, nos habla el poema” … “Y entramos ahí, a la poesía, con la misma inocencia y la misma entrega, el deseo de saber qué les pasa a los otros para aproximarme a mí , qué me pasa a mí para llegar a los otros.”Diana Bellessi - La pequeña voz del mundo