“Como si la poesía quisiera reinventarse volviendo a su primitivo carácter mítico y sagrado, siete mujeres: Marta, Norma, Chaly, Marta, Cristina, Mirta y Marisa, se inclinan siete veces sobre el papel en blanco y escriben y reescriben siete signos, que se multiplican una y otra vez siete veces el séptimo día del séptimo mes del séptimo año del tercer milenio de nuestra era.”